No me siento diferente al resto de la gente. Y talvez ese es mi problema; que me adapto tanto a los demás que de cara al resto de personas me busco un camuflaje que me hace pasar bien desapercibida. Y me da que pensar. Y me aclara las ideas en relación a lo que busco que, pensándolo bien, no es nada del otro mundo.
Dejando de lado cuatro silbidos por la calle que buscan incomodarme pero no consiguen más que subirme la autoestima, estoy empezando a cuidar demasiado mi aspecto exterior. De sentimientos digamos que tengo las ideas bastante claras.
2 comentarios:
A veces no buscar nada del otro mundo es extremadamente dificil.. Te lo digo yo (simple experiencia)
No creo que nadie busque nada que no sea del otro mundo. Considerar normal lo que queremos... ¿acaso no es sólo asumirlo? ¿Y decidir que lo que queremos es justo, normal, adecuado?
Nadie es fácil en cuestión de sentimientos. Y menos, las mujeres.
Publicar un comentario